El mole es un plato típico mexicano que se ha convertido en uno de los más preparados y de los más pedidos por la comunidad e incluso por los extranjeros que visitan el país. Específicamente es originario de la ciudad de Puebla.
Son 2 las versiones más famosas que se le atribuyen a la creación de este delicioso platillo y ambas datan de la época prehispánica. La primera, cuenta que Sor Andrea de la Asunción una monja dominica del convento de Santa Rosa, fue la encargada de idear el primer mole de la historia el cual fue servido al Virrey Tomás Antonio de la Serna y Aragón, Conde de Paredes y Tercer Marqués de la Laguna en su paso por la ciudad y el mismo, quedó encantado con la maravillosa receta.
En la segunda versión, la creación se le atribuye a San Pascual Bailón, quien siendo el cocinero principal de un convento poblano le correspondió la responsabilidad de preparar un banquete para Juan de Palafox, Virrey de la Nueva España y Arzobispo de Puebla. Fray Pascual, nervioso ante la presión, derramó sin querer una cazuela con ingredientes varios (que hoy en día se usan para la preparación del mole) sobre una olla que contenía guajolotes (pavos) casi al punto. Más tarde se sorprendió ante los elogios de todo el mundo respecto a su platillo improvisado.